Los LEDs son básicamente pequeños diodos que producen luz cuando una corriente eléctrica pasa a través del material semiconductor del que se componen. Es un elemento sólido de gran duración y resistencia que, a diferencia de una bombilla eléctrica convencional, no tiene una resistencia ni cristales que puedan romperse o quemarse.
Un diodo es el dispositivo semiconductor más simple que hay. Es básicamente un material semiconductor compuesto por un material de conducción pobre al que le han agregado “impurezas”. Este proceso se conoce como “dopaje”, y las impurezas agregadas no son más que átomos de otro elemento, que modifica las propiedades de conducción del material. En el caso de los LEDs este material es típicamente Arseniuro de galio-Aluminio/Aluminium. En el Arseniuro de galio-Aluminio/Aluminium puro, todos los átomos se enlazan perfectamente entre sí, lo cual no deja electrones libres para producir una corriente eléctrica. Cuando se dopa el material, se modifica el balance agregando electrones libres (cargas negativas) o “agujeros” (cargas positivas). Dependiendo del material que se agregue lo cual modifica sus propiedades de conductividad y define el tipo de semiconductor que se crea.